lunes, 5 de septiembre de 2011

Soltar el rollo


Estoy releyendo a Cicerón: es un ejercicio que no me agota, y aún hace calor para cosas más fatigantes. Como decía, releo a Cicerón, concretamente su "Defensa de Sexto Roscio de Ameria", y me hallo con este fragmento (párrafos 100-101)...

Todo esto me lo va a oír [Capitón] si se presenta como testigo, mejor dicho, cuando se presente, pues sé que piensa hacerlo. Que venga ya. Que desenrolle ese volumen que, según yo puedo demostrar, Erucio ha escrito para él.

"Que desenrolle ese volumen". Para entender esa frase hay que conocer una particularidad del derecho romano. A diferencia de lo que se espera de un testigo en un juicio español de hoy en día, a un testigo romano se le permitía llevar su testimonio por escrito y leerlo ante el tribunal; de ese modo evitaba caer en contradicciones internas y podía recurrir a la ayuda de terceros para mejorar su oratoria y poder de convicción. ¿A quién tiene que convencer un testigo? ¿Por qué podría contradecirse si sólo dice la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad, según la fórmula de las películas americanas? ¿No es el juez quien debe hacer las preguntas para asegurarse de la veracidad del testimonio? ¿Cómo puede el testigo saber de antemano lo que debe contestar a unas preguntas que aún no han sido formuladas?
            Sorprendente para nuestros usos, pero normal a los ojos de un romano del siglo I a.c. El testigo llevaba su testimonio en un volumen, es decir, un rollo escrito, cuya longitud sería por tanto proporcional a la del discurso que iba a pronunciar. Así, con el volumen bajo el brazo, cuando se le preguntaba tomaba su escrito, destaba el cordelito y procedía a soltar el rollo.
            Todos podemos imaginar la expresión de jueces y testigos cuando algún botarate poco ducho en la oratoria soltaba un rollo de cierta consideración.         
            Ahora ya sabemos de dónde procede, probablemente, esta expresión. Espero no haberos soltado un rollo.


12 comentarios:

  1. Ojalá que todos los rollos que tenemos que soportar fueran como éste!
    ¡Bienvenido de nuevo al mundo, Josep!¿Has escrito más rollos este verano?

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  2. No es mala idea, eso de ir con el rollo por delante. Ahora ciertos discursos se hacen con una cosa llamada "teleprompter" o algo así, que son unas pantallitas grises semitransparentes donde pueden leer lo que tiene que decir. Por lo menos lo del rollo tenía estilo... y al desenrrollarlo ponía sobre aviso al pobre auditorio de lo que se le venía encima. ¡Buen inicio de curso, Josep!

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  3. Bueno, Ario, me he dedicado sólo a repasar la lengua de Molière y a cosas de galenos. Gracias.
    Alejandro, gracias. Sí, esos cacharros grises son los que ponen en aprietos a más de un presentador. Jejé

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  4. Probablemente, cuando el botarate aparecía con diez kilómetros de testimonio, el juez se bajaba de su sitial cuchillo en mano y metían un tajo mientras le decía eso de "corta el rollo, chato".

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  5. Muy bueno, sí señor. Sebas, oh maestre de, eres el más grande.

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  6. Es agradable verte por aquí otra vez, Josep. Buena entrada.

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  7. Sí, a ver si me tomo esto del blog en serio.

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  8. Hola, Josep! Es curioso, pero las cosas que al resto de mortales nos parecen insignificantes y que en una leida rapida ni percibimos, tú, como buen cirujano, deseccionas y nos abres a otra dimensión. Quien iba a decir que la expresión "no me sueltes un rollo" venía de tan lejos. Nosostros los de la generación de los 60 creíamos que era una modernidad cuando decíamos "que rollo tienes, colega". Lo que son las cosas.
    Un abrazo, Josep.
    Nos vemos.
    Ricardo Rivera Llácer

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  9. Gracias. Yo tampoco caigo muchas veces en la cuenta de muchas cosas, pero de vez en cuando se me enciende la bombillita.

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  10. Pues yo vengo de una asamblea y he echado de menos que alguien "se soltase el rollo" en lugar de realizar ejercicios de improvisación.

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  11. Un rollo estupendo, josep, como todos los tuyos. ¿Vendrá también de ahí la expresión "buen rollo"? A lo mejor quería decir que era voluminoso el rollo, o que el contenido era muy bueno. Sea lo que sea, tú lo bienes bueno. Besos.

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  12. Gracias, Isabel. No sabes las ganas que tengo de ver Roma fundada... en papel.

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